miércoles, 29 de noviembre de 2017

FIESTAS DE LA "VIRGEN DEL SAYUGO - 2017.Gozón de Ucieza (Palencia)


FIESTAS DE LA "VIRGEN DEL SAYUGO - 2017

Gozón de Ucieza (Palencia)

Un año más, y durante los días 15, 16 y 17 de septiembre de 2017, se han celebrado en Gozón de Ucieza (Palencia), las fiestas en honor de nuestra señora, La Virgen del Sayugo.

Este año, hemos echado en falta a varias familias y personas que por circunstancias no pudieron acompañarnos, lo que significa que hemos sido menos concurrentes que otros años, pero seguro que muchos de ellos volverán.
Hay una cosa que llevo observando varios años, y es que vienen cada vez, más personas mayores de más de 80 años nacidas en el pueblo, acompañadas de hijos y o nietos, que hace tiempo no se les veía por el pueblo. He hablado con ellos, y todos me comentan que en los últimos años, sienten como una necesidad perentoria de venir al pueblo y precisamente el día de La Virgen del Sayugo. Sin comentarios.

Las fiestas de éste año 2017, se han celebrado con el espíritu de siempre. Una estupenda acogida a todo el mundo, la armonía y simpatía de siempre. Y esto, teniendo en cuenta que la mayoría de los asistentes, somos personas de mayores de 60 años. Pero se da una circunstancia que a mi me llama mucho la atención y me encanta, y es que los mayores nos abrimos a los jóvenes y estos sin problema alguno a todo el mundo. Bonito, no?

Llevamos ya varios años, que el tiempo nos acompaña con unas temperaturas estupendas, y éste así ha sido. lo que no quita, para  que ya todo el mundo deseemos un par de meses pasados por agua, es necesario.



Seguidamente, unas fotos.










martes, 6 de junio de 2017

Ermita de la Virgen del Sayugo 
Las fiestas en su honor


Imagen de la Virgen del Sayugo en andas y fuera de su nicho. Fiestas 2016 



Altar de la ermita. (algo deteriorado)


Cachaperas dedicadas a la Virgen del Sayugo. 2016

Hasta hace unos pocos de años solo se hacía una cachapera. Aunque era bastante más grande que entre las dos actuales juntas. Actualmente se hace una cachapera pequeña, para disfrute de la gente más menuda.   
Ésta foto recoge con claridad la situación del pueblo, la ribera del río Valdecuriada bordeado por su arboleda desde la perspectiva del alto de la ermita de la Virgen del Sayugo.
                    
Fachada oeste, orientada hacia el pueblo. (con 2 sobrinos míos. 


La ermita, situada en una loma próxima al pueblo (unos 500 m) está dedicada a la advocación de la Virgen del Sayugo (derivación de saúco). Ésta, goza de una gran devoción por parte de todos los nacidos y descendientes del pueblo; tanto por los que allí viven, como por los que tuvimos que irnos del mismo, y que repartidos por  toda España, tratamos de acercarnos a celebrar el día de su fiesta. Esta estima y devoción hemos conseguido trasladársela a la mayoría de nuestros descendientes.
En éste apartado, no podemos dejar de hacer un gran reconocimiento, a todas las personas que desde varios pueblos cercanos, se acercan a celebrar ésos días de fiesta con todos nosotros. Su devoción por la Virgen del Sayugo, no es menor que la nuestra. Gracias.
Desde que yo tengo conocimiento, la fiesta en su honor, se celebra el tercer domingo del mes de septiembre. Ahora bien, ésta comienza realmente un par de días antes.
El viernes. Ése día por la tarde/noche, se celebra en el pueblo y al lado del teleclub, una merienda popular al aire libre, con chorizo, panceta de cerdo y pimientos de pueblo, para todo aquel que desee acercarse al lugar donde se asa al aire libre, todo ello al fuego de leña en varias parrillas. Todo ello, preparado y repartido por los mozos del pueblo, acompañado con excelente vino clarete, cervezas y varios tipos de refrescos. (y todo ello, gratis).
Y mientras se saborea esta merienda/cena, se va preparando en el teleclub de la localidad, todo lo necesario para jugar “un campeonato de mus rápido por parejas”, en el que se puede ganar un jamón si eres el afortunado campeón, o una serie de embutidos, si resultas subcampeón. No siempre es un jamón, vale? Pero yo, sí que gane uno. O sea, que los organizadores según su acertado criterio, cambian los premios como creen oportuno. ¡¡¡¡¡No sea que nos acostumbremos a los de pata oscura, eh? Bueno, nunca se sabe igual descubren alguna vez lo de la pata oscura. Cosas más fantasiosas he visto………….
Dado que bastantes de los participantes a dicho campeonato somos ya gente, (digamos que seria) deseo exponer una queja en nombre de todos, por lo tardío de su celebración. Si, ya se que es para la gente, (digamos que más joven), pero yo me pregunto, que sería de ése campeonato sin nuestra participación? 
El sábado. Ése día por la mañana, y también por parte de los jóvenes, se prepara “una gran paellada”, a la que se suman bastante gente del pueblo (no sé en qué condiciones).
Ya por la tarde, a eso de las 19 horas, y desde la iglesia, se sube en andas la imagen de la Virgen a la ermita, por parte de los jóvenes del pueblo.
Previamente, se celebra una misa en la iglesia parroquial, a la que sigue la novena en su honor, y por el camino hasta la ermita, se reza el rosario; al llegar al alto de la loma donde está situada la ermita, y ya dentro de la misma, cantamos todos los asistentes, “La Salve” en su honor.
A continuación, y siguiendo con los festejos, se realiza el encendido de la famosa “cachapera” de Gozón de Ucieza, en la explanada aneja a la ermita, y que al estar en el alto de una loma, es visible desde varios pueblos de las cercanías.
 La ermita, situada en una loma próxima al pueblo (unos 500 m) está dedicada a la advocación de la Virgen del Sayugo (derivación de saúco), que goza de una gran devoción por parte de todos vecinos del pueblo; tanto por los que allí viven, como por los que vivimos fuera del mismo, repartidos por  toda España, y que nos acercamos a celebrar el día de su fiesta. Tenemos que recordar también, a todas las personas que de varios pueblos cercanos, se acercan a celebrar ésos días con todos nosotros. Desde que yo tengo conocimiento, las fiestas en su honor, se celebran el tercer domingo del mes de septiembre. Ahora bien, ésta comienza realmente antes.
El viernes. Ése día y por la noche, se celebra una merienda popular al aire libre, con chorizo de pueblo, pimientos y panceta entreverada de cerdo, para todo aquel que desee acercarse al lugar donde se asa todo ello al fuego de leña en varias parrillas, y reparten los mismos mozos del pueblo que lo preparan. Todo ello, acompañado con vino, cervezas y varios tipos de refrescos. (y todo ello, gratis). Mientras se saborea esta merienda/cena, se va preparando todo, para jugar “un campeonato de mus rápido por parejas”, en el teleclub de la localidad, en el que se puede ganar un jamón si eres campeón, o una serie de embutidos, si resultas subcampeón. No siempre es un jamón, vale? Pero yo, sí que gane uno. O sea, que los organizadores, cambian los premios según creen oportuno.
El sábado. Ése día por la mañana, y por parte de los más jóvenes, se cocina “una gran paellada”, a la que se puede sumar la gente del pueblo que le apetezca (no sé en qué condiciones).
Ya por la tarde, a eso de las 19 horas, se sube en andas la imagen de la Virgen a la ermita, por parte de los jóvenes del pueblo. Antes, se celebra una misa en la iglesia parroquial, se sigue la novena, y por el camino hasta la ermita, se reza el rosario, y al llegar a la ermita, y dentro de la misma, cantamos todos, “La Salve”. A continuación, siguen los festejos en su honor, con el encendido de la famosa “cachapera de Gozón de Ucieza”, en la explanada anexa a la ermita, y que al estar en el alto de una loma, es visible desde varios pueblos de las cercanías.
  Y mientras la “cachapera” se va consumiendo, se reparte entre los asistentes, un excelente chocolate con bizcochos, cocinado por parte de las mozas del pueblo. Seguidamente, bajamos todo el mundo al pueblo a disfrutar de una sesión de música que se celebra en la plaza de las Casas Nuevas, que los más jóvenes disfrutan a su manera; y al que esto no le apetece, pues se acerca al teleclub que está al lado, a refrescarse un poco, y a terminar de saludar a todo el mundo, que es una costumbre de lo más saludable y beneficioso para toda buena convivencia, y se recuerdan tiempos pasados con aquellos que hace un tiempo no vemos.
Ya el domingo, y por la mañana, se tocan y voltean las campanas de la torre del pueblo, para anunciar a todo el mundo, que llega la hora de la santa misa que se celebra en la ermita, más menos sobre las doce de la mañana. Hasta hace unos años (unos 15/20), la misa era cantada y concelebrada por tres o más sacerdotes, y se invitaba a algún sacerdote o fraile conocido o apreciado por los vecinos, en el antiguo púlpito fabricado en madera torneada y pintado de color verde oscuro. (que entonces lucía la ermita) a que nos ensalzara o recordara los valores y virtudes de la Virgen del Sayugo. Supongo, que las personas mayores se acordarán aún de cuando la ermita estaba decorada con un púlpito y un arambol o balaustrada, ambos de madera labrada y pintados en color verde oscuro, que le daban a la ermita una entidad especial. Una verdadera pena. Ahora, pues un local rectangular, pintado hace poco, pero sino fuera por el altar que luce la ermita y que tiene algo de enjundia, pues eso. ¿Quién pudo hacer o consentir ésa barrabasada? Después de la misa, el consabido vermú en el "teleclub" del pueblo, durante el cual los mozos y no tan mozos del pueblo, obsequian a todo el mundo con variedad de aperitivos, tanto en el interior del mismo, como en varias mesas preparadas para tal fin, en la vía publica. Luego y como corresponde, a yantar. 
Yo, les doy una sugerencia para ésa comida en particular: La mejor compañía posible, uno o dos cuartos delanteros de lechazo o cordero de la tierra, acompañado de una buena ensalada verde, y regado por un buen vino de cualquiera de las magníficas zonas de nuestra tierra. 
Y ya, por la tarde, nuevamente en la ermita, el rosario, y la procesión alrededor  de la ermita con la imagen de la Virgen del Sayugo en sus andas; de seguido, una colecta pública voluntaria, para la conservación de la imagen de la imagen de la Virgen y su ermita.

Himno en honor de “Nuestra Virgen” La Virgen del Sayugo.
Virgen del Sayugo
madre de mi Dios,
extiende tu manto
y cobijanos.

1.- Oh Virgen de Sayugo,
Oh reina de Gozón,
Oh madre del señor.
Mira, mira a tu pueblo,
Que sube hasta tus plantas,
Mírale con amor.

2.-  Gozón que te quiere
Y el pueblo que te adora,
Te lo ha jurado así:
Toda ésta tu parroquia
No tiene otra Señora,
Y vive para ti.
Este himno, le conozco de siempre, y se lo cantamos en varias ocasiones, y al hacerlo, como que nos sentimos como un poco más cerca unos de otros. Bueno, eso me parece a mi.

Para terminar los festejos en honor de La Virgen, se la vuelve a bajar en procesión hasta la iglesia del pueblo, en medio de cánticos de todos los acompañantes. Y hasta el año que viene. La rueda sigue. !!!Que dure¡¡¡
Decir que, desde ya hace años, la imagen de la Virgen, se la recoge en la iglesia, que está sita en el centro del pueblo, ya que al estar aislada la ermita, se evitan posibles tentaciones.     
Seguidamente, varios comentarios/rumores sobre ésta Virgen. Según la rumorología del pueblo, ésta virgen se apareció encima de un saúco en lo alto de la loma donde está situada la ermita, procedente de Sahagún de Campos (León). El  saúco, al parecer, se encontraba/encuentra debajo del único altar existente en la ermita. Yo nunca he podido comprobarlo. Ahí lo dejo. También según esos rumores, trataron de llevársela en varias ocasiones de vuelta a su anterior morada con un carro tirado por bueyes, y estos, se negaron a andar hasta que desistieron de llevársela. Hay otra versión sobre el carro y los bueyes; y es que al no desistir de querer llevársela, el carro con los bueyes, se fueron cuesta abajo y no les pasó nada.
Toda ésta rumorología, la he oído infinidad de veces desde “chiguito” tanto en mi casa como fuera, y en varias ocasiones, especialmente a las personas de más edad, y naturales del pueblo.
En esta línea de cosas, y cambiando de tercio, otro comentario de cosas del pueblo y que recuerdo desde niño. Después de salir de la escuela por la tarde, los chiguitos, nos íbamos en ocasiones a explorar unas cuevas que existían/existen muy cerca de la ermita. Si nos situamos en la ermita por su parte sur, y siguiendo la loma de la ermita, vemos que el mismo, va subiendo en altura; pues bien, en la parte izquierda de la ladera que mira hacia el puente sobre el río Ucieza, es donde estaban/están las cuevas que indico. Y aquí viene otra sorpresa. En casa de mis padres, se comentaba que en la parte más alta de la loma, pudo existir: un palacio, un castillo o algo similar. Desde siempre ha existido y sigue existiendo, “la senda del castillo”. Dicha senda, pasa muy cerca de la ermita, y la podemos encontrar indicada, en el plano nº 4 de la concentración parcelaria del pueblo. Casualidad?,  pista?, Ud mismo. Pero yo creo que es una realidad.
Recuerdo perfectamente que cuando éramos chiguitos explorábamos dichas cuevas, encontrábamos cosas diversas, como restos de cerámica o cosas similares y otras más que ya no recuerdo. Cierto es que nunca más he vuelto a subir ni a pasear por donde estaban aquellas cuevas. Habrá que volver antes de que sea tarde.
Hay otra cosa que quiero comentar en la misma línea de lo anterior (y todo ello con la debida reserva).
Tengo un conocido que vive en Madrid, que en más de una ocasión me ha comentado que posee un libro que hace ciertas referencias o está mayormente dedicado a nuestro pueblo. Pues bien, y según él me dijo, el libro expone que en tiempos de la ocupación romana de Hispania, nuestro pueblo era un punto importante en su organización militar.

Al parecer había como una base o campamento militar que suministraba y abastecía de todo tipo de necesidades, a las legiones romanas que luchaban contra los cántabros y los astures en el norte de Hispania. No hace mucho tiempo, estuvimos juntos en una celebración de unas bodas de oro, y me prometió que si encontraba el libro, me lo dejaría para poderlo echar un vistazo. Al parecer, cambió de vivienda y no le aparece el libro. Una verdadera pena.

jueves, 30 de marzo de 2017

Gozón de Ucieza (Palencia).
Los medios de transporte
 Debemos tener en cuenta que en aquellos años (al menos en nuestro pueblo), no existían coches, ni camiones, ni motocicletas. Tan solo existían varias bicicletas (pocas), y claro, los carros con sus ruedas de madera y llantas de hierro. Luego, bien por el pueblo o en pueblos cercanos existían algunos coches de línea:                            
   1º- Por nuestro pueblo y de lunes a viernes, pasaba un coche de línea que llamábamos de Martín. Este, que hacía su recorrido por la carretera P-240, salía de Saldaña por la mañana, e iba parando en todos los pueblos del recorrido hasta el final de línea que era Osorno. Los pueblos a los que daba servicio saliendo desde Saldaña por la carretera P-240, eran: Velillas del Duque, Quintanilla de Onsoña, Villaproviano (en el cruce de la P-240 con la P-241 ), Gozón de Ucieza, Bahillo, Villasarracino, Fuenteandrino, Abia de las Torres y Osorno. 
Por la tarde/noche, el mismo recorrido, pero al revés. En Osorno, al haber estación de Renfe, que sigue funcionando entre Santander y Palencia, Valladolid y Madrid, nos servía de salida hacia el resto de España.
   2º- la segunda opción era un coche de línea llamado Abagón. Había que ir a cogerlo al pueblo vecino de Villaproviano (3km). Procedía de un pueblo del norte de la provincia llamado Villaverde de la Peña por la CL-626 con paradas en: Las Heras de la Peña; Villanueva de Arriba; Muñeca; Guardo  aquí por la CL-626, Pino del río, Saldaña, Velillas del Duque, Quintanilla de Onsoña, Villaproviano (pueblo), y otros varios pueblos en dirección Palencia. Por la tarde/noche, realizaba el mismo recorrido, pero al revés.
3º- la tercera vía de salida, era la que llamábamos el coche de Aja. Y había que ir a cogerlo a un pueblo llamado La Serna a unos 8 km. de distancia. Esta línea, que sigue existiendo hace su recorrido por la carretera CL-615 desde Guardo hasta Palencia, en ambas direcciones y con varios horarios.
Los pocos afortunados que tenían una bicicleta, podían acercarse libremente a poblaciones cercanas, aunque las carreteras no animaban mucho a ello. De todas formas no quedaba más remedio, si había que ir a Carrión o Saldaña a por medicinas u otras necesidades. Concretamente, yo iba a ambas poblaciones a cambiar novelas del oeste, y varias cosas más. Otros, por necesidades de su trabajo, iban en bicicleta hasta Saldaña, Sahagún de Campos (León), Osorno, Carrión de los Condes y hasta Palencia. Y vuelvo a insistir, en que los pocos tenían bici, eran unos afortunados. Como detalle, les contaré que el año que hice la primera comunión, para comprarme el pertinente traje de marinero, mi madre me llevo andando a comprarle a Saldaña. Pero lo bueno, es que fuimos a pie y volvimos andando. Total 12 kilómetros de nada por la carretera sin asfaltar, llena de polvo y cantos partidos. Había personas, que se iban andando de madrugada los martes al mercado de Saldaña, para vender huevos u otros artículos del campo. así eran de duros aquellos tiempos.   

lunes, 13 de marzo de 2017

La iglesia de San Miguel

Edificios destacables: La iglesia de San Miguel







                   
La iglesia, es del siglo XVI según unos, o del siglo XVIII según otros. Es del mas puro estilo neoclasicismo, y está dedicada a San miguel Arcángel, que es el patrono del pueblo. Su fiesta se celebra, el día 8 de mayo. (en otras poblaciones cercanas, lo celebran el día 29 de septiembre)
La misma, consta de tres naves, destacando un retablo del evangelio del siglo XVI, y otro retablo, éste Neoclásico, con la imagen de la Virgen del Sayugo, también del siglo XVI. En la nave epistolar, sorprende una excelente estatua del Arcángel San Miguel, espada en mano, del siglo XVI. El que éstas tres coincidencias sean del siglo XVI, confirma que la iglesia, es al menos, también del siglo XVI?. En la nave de la izquierda, existe un altar dedicado a San Martín con sagrario incluido. El mismo, se cree que perteneció al desaparecido pueblo de Mañueco, ya que no es normal que haya dos altares con sagrario en una misma iglesia.
Recinto bautismal. Debajo de la parte central del coro, está situado dicho recinto, en la que hay una gran pila de piedra tallada, en la que recibíamos todos el bautismo. La parte delantera por la que se entra, tiene unas barandillas de madera labradas excelentemente.
             El monumento de Semana Santa. Cuando era aún un chiguito, recuerdo muy bien, que había un monumento de madera pintada, en el cual se celebraban las ceremonias propias de la fechas, que se colocaba por Semana Santa al lado del altar de San Martín, que se desmontaba y guardaba.
Dispone de una amplia sacristía en la que hay una estupenda y gran cajonera de madera en la que se guardan todo la ropa y complementos utilizados por el sacerdote.
Su coro. Está situado en la parte superior y posterior de la iglesia. Dispone de tres arcos coincidentes con la distribución de la iglesia. Tiene el suelo de madera, y le decora en su parte delantera, un arambol de madera en cada uno de los tres arcos. Se accede al mismo, por una escalera de madera. Antaño, todos los mozos del pueblo subían al mismo durante todos los oficios que se celebraran en la iglesia. Así mismo y en su parte central, se situaban varias personas del pueblo, para cantar las misas tanto gregoriana como de difuntos que se celebraban en latín por aquellos tiempos, o cualquier otra celebración.
Su torre. Toda ella está fabricada en piedra. La parte superior esta ocupada por un campanario que ostenta seis troneras que acogen a su vez, a tres campanas. Así mismo y en su parte central, una gran viga, sostiene dos campanones (campanas muy grandes). Las campanas, han sido recientemente recuperadas por dos vecinos del pueblo: Juan y Justino. Estaban bastante deterioradas y las han dejado como nuevas. Un trabajo excelente. Gracias por vuestro trabajo y mi reconocimiento.



jueves, 9 de marzo de 2017

Costumbres perdidas. El juego de la nita.

Éste juego, es llamado de varias formas en función de la zona de España que hablemos.     En nuestra zona, creo que también es conocido como Tanga. Pero en Gozón de Ucieza, es la Nita. 
El mismo, se compone de una nita y dos tejos. La nita, es un trozo de madera trabajada con una navaja, y las hacíamos los mozos del pueblo. La medida, variaba algo en función de quién la hacía, pero la estándar era de unos 120/150 mm de larga, y de 40/50 mm de diámetro. La misma es de forma cónica, más ancha en los extremos y más estrecha en el centro. Cada uno a su manera. Los tejos, son de forma circular, fabricados en hierro, y de unos 100/150 mm. de diámetro. Nosotros, en función de los que quisieran jugar, hacíamos equipos de dos, tres o más jugadores. Se echaba una moneda al aire para saber quién empezaba el juego, y luego, tira un jugador de cada equipo alternativamente. En teoría, se trata de tirar la nita con el primer tejo, y colocar el segundo más cerca del dinero que esté de la nita; se mide con una cuerda, y las monedas más próximas al tejo, es la ganancia. Sino se lleva todo el dinero, tira el siguiente (un contrario) y así hasta que se gane todo lo puesto. En el pueblo, se jugaba siempre con monedas que se ponían encima de la nita. Éste juego, se ejecutaba sobre un trozo de tierra allanado debidamente de unos veinte metros de largo, por dos metros o más de ancho. La nita, se coloca en un extremo del campo a unos 12/15 metros (según acuerdo), y en la parte contraria, se hace una raya sobre el suelo, que marca el punto desde donde se tiran los tejos.


A éste juego, nos dedicábamos generalmente, las tardes de invierno en que hacía sol, y no había trabajos que hacer. También se practicaba en otras épocas del año, pero no con tanta frecuencia. 
Costumbres perdidas: La chiborra:

Esta fiesta, se celebraba en el pueblo, todos los años el día que caiga el martes de Carnaval. Ése día no había escuela, ya que éramos los chiguitos (niños) en edad escolar quienes lo celebrábamos a lo grande. Para celebrar la misma, nos juntábamos varios chicos de la escuela, preparábamos la fiesta a conciencia y llegado el día, varios niños nos vestíamos de “chiborra". El “traje” del chiborra se componía de: un pantalón, una camisa y una chaqueta de las peores y más viejas ropas que encontrábamos cada uno en casa, incluso si estaban rotas, mejor que mejor. Luego, una careta de cartón pintada con los más feos colores para dar miedo. Un “estropajo”. Éste artilugio se componía de un palo de metro y algo de largo, al que atábamos en una punta varios trapos largos, y rotos. Y por fin, llevábamos atadas a la cintura, varias esquilas de las que se ponían a las cabras y ovejas, y unos cencerros  de los que llevaban las vacas, para tratar de hacer el mayor ruido posible. Y ataviados con toda ésa parafernalia, “los chiborra”, acompañaban al resto de chiguitos (niños), que vestidos también con ropajes similares y armados también con palos, y provistos de diversos cestos y cestas de mimbre, recorríamos el pueblo, pidiendo por todas las casas del pueblo, lo que buenamente pudiera dar cada señora, con el fin de poder preparar una cena pantagruélica. Aparte del acompañamiento al resto de compañeros, “los chiborra” y de vez en cuando, nos íbamos detrás de las jóvenes que veíamos por la calles, con el “estropajo” lleno de agua y barro, para tratar de ensuciarlas  lo máximo posible. Los alimentos que nos solían dar por el pueblo, eran: huevos, patatas, pan, chorizo, tocino, y alguna otra vianda a mayores. Éste circo ambulante y correcalles solicitando ayuda y jaraneando por todo el pueblo, se terminaba a mediodía. Acabado ello, llevábamos las viandas recogidas a la casa que previamente, ya habíamos llegado a un acuerdo con alguna señora, para que nos cocinara la gran cena. La gran cena, se componía de: tortillas variadas, chorizos y huevos fritos, etc. Las señoras que recuerdo que nos lo cocinaban y prestaban su casa para la gran cena mayormente, eran la señora Fermina y la señora Clara. Esta es, en esencia, la tradición que recuerdo de nuestro pueblo hacia los años 60-70, para celebrar el Carnaval. También  lo celebraban las mozas y mozos del pueblo. Eran unos tiempos estupendos.


miércoles, 8 de marzo de 2017

Costumbres perdidas :La fiesta del pueblo. 8 de mayo, San Miguel.

 Este Arcángel,  el más importante de los siete reconocidos por la Iglesia Católica, y jefe del ejército celestial, es el patrón de nuestro pueblo, y su fiesta se sigue celebrando, el día 8 de mayo. Cuando yo era un crío, aún era la fiesta más importante de Gozón de Ucieza; en la actualidad, La Virgen del Sayugo se le ha subido a las barbas a San Miguel, y su fiesta supera en todo a la de San Miguel desde unas cuantas décadas. Bien, una vez aclarado esto, sigo con lo que aún recuerdo del San Miguel de antaño. Dado que estuve en dos tiempos diferentes de mi vida en el pueblo, puede ser que entremezcle recuerdos de ambas etapas. Bien. Unos días antes de la fiesta, los niños, ya estábamos comentando entre nosotros la fiesta, y soñando con los cuqueros que vendrían con sus tenderetes a vendernos todo tipo de dulces, algún petardo que hacer explotar, globos y algunos juguetes; o tratando de averiguar que orquesta iban a traer los mozos para la fiesta.
Todo aquello para nosotros, era el no va más. Salíamos de la rutina de todos los días, y disfrutábamos de la fiesta ya de la fiesta antes de llegar. La víspera de la fiesta, varios mozos con un carro de varas tirado por un caballo, iban por la tarde al coche de línea de Aja, que pasaba y aún pasa, por la ctra. CL-615 (la carretera de la vega, decíamos en el pueblo) en el término de la Serna (unos 6 kms.), a recoger a la orquesta que iba a tocar durante las fiestas de San Miguel. Al llegar los mozos al pueblo, con los músicos y éstos con todos sus tratos cargados en el carro de varas, los chiquitos ya nos les dejábamos ni a sol ni a sombra. Aquello era la leche. Nosotros ya estábamos de fiesta. Durante varios años, ésta orquesta, que era del pueblo de Paredes de Nava (Palencia). Estaba compuesta por cinco músicos que tocaban estupendamente, y que como se decía antaño, cayeron bien en el pueblo. Tal fue así, que uno de ellos (el trompetista) casó con una moza de Gozón de Ucieza.

Al no haber en el pueblo, fonda ni nada por el estilo, los músicos, se hospedaban en las casas de los mozos del pueblo, como si fueran unos invitados más. En aquellos entonces, la pensión más cercana, se encontraba en Saldaña, a unos doce km. por la carretera P-240 que va desde Saldaña hasta Osorno y pasa por Gozón de Ucieza, y aún no había asfaltada ninguna de las carreteras del entorno. Su suelo era de canto redondo partido y mezclado con tierra. En fin, que eran la comodidad echa suelo. Y es que además, no existían otros medios de comunicación que los coches de línea con sus horarios establecidos. Bueno, alguna bicicleta, sí había en el pueblo. Luego, la fiesta oficial en sí, comenzaba el día siguiente. San Miguel. ¡Qué tiempos! Y la fiesta! el 8 de mayo, era la repera. Estrenábamos algo de ropa, algún año zapatos nuevos, y encima era de cuando más dinero disponíamos de todo el año. La torta. La felicidad completa. Claro. Pero el dinero, no venía solo, así que a pedir la propina a todo pariente que se pondría a tiro. Pues que empiece la fiesta. Por la mañana y antes de la santa misa, la orquesta, acompaña de los mozos del pueblo, y toda la chiquillería detrás, tocando a todo volumen, recogía a la puerta de sus casas, a los señores componentes del Excelentísimo Ayuntamiento, para acompañarles hasta la iglesia, a oír y disfrutar de la Santa Misa Gregoriana, ¡cantada¡. Una vez en la iglesia, la orquesta se situaba en la parte central del coro junto con las personas que cantaban la misa. Entre ellos, destacaba uno, que cantaba como los ángeles. Pepe.   El coro, que está situado en la parte posterior y sobre la zona del bautisterio (baptisterio), tiene tres arcos, coincidentes con las tres naves de la iglesia. Al consagrar el sacerdote la eucaristía, los músicos entonaban el himno Nacional Español, que llenaba con su música y de tal forma la iglesia, que al menos a mí, me impresionaba tanto, que me parecía el no va más. En la parte izquierda del coro, se acomodaban los mozos, y la parte derecha del mismo, siempre estaba lleno de andas, estandartes, etc.
Costumbres perdidas: Llamadas a TONGA:

Éstas llamadas, se hacían por medio de la campana más grande de la torre (el campanón). Normalmente, era para recabar la ayuda de una persona por cada casa del pueblo, e ir todos juntos, a arreglar algún camino, arroyo u otra circunstancial ayuda que necesitara el pueblo. O sea, para el bien común.  Por ejemplo. Para atravesar el río Valdecuriada, recuerdo que había dos puentes hechos con chopos largos y gordos, ramaje y césped para pasar las personas. Uno, en el camino de Gozón de Ucieza a Villota del Duque, y el otro, en el camino del pueblo a Portillejo. Pues bien, éste trabajo, lo realizaba todo el pueblo y no era moco de pavo, con los medios de entonces.
Y el problema, no era hacerle una vez, pues de cuando en cuando se le hinchaban las narices al río, y una gran riada, se llevaba por delante la mayor parte de los puentes. Y vuelta a empezar otra vez. Entonces, los inviernos eran duros, muy duros. Llovía bastante, caían unas nevadas de cuidado y los ríos se helaban de tal modo, que los chiguitos, resbalábamos por encima del hielo en la parte más honda del mismo. Así que cuando venía el deshielo tanto de la nieve como de los hielos, riada al canto. Además, en pleno verano, caían unas tormentas de aúpa; he visto al río Valdecuriada, atravesar la carretera y amenazar con su llegada a las bodegas más bajas.



La producción.
Dado que nuestra zona es de secano, y no hay muchas alternativas productivas, la practica totalidad de la misma, era y sigue siendo, mayoritariamente agrícola. Ganadera, en muy menor medida.
Nuestro pueblo, dispone de un terreno, que en buena medida, es bueno. Aunque sea de secano. Su geografía, es bastante irregular, en cuanto que tiene abundantes lomas, arroyos (unos 40), y otros desagües menores (que desembocan en los ríos Valdecuriada o Ucieza), y conforman una variedad de pequeños valles muy diversos, con un terreno de excelente calidad. Los productos agrarios que mejor se dan en estos terrenos, que eran los siguientes:
Trigo, cebada, avena, yero, lenteja pardina, guisante (arvejas), garbanzo, tito, muela, chocho (altramuz), la patata, y vino.  Ahora bien, la mayor parte se la llevaban el trigo, la cebada, los yeros y las lentejas.
Había además, una buena cantidad de hectáreas dedicadas a la vid. El vino que se daba, era un clarete con algo de aguja, bajo en alcohol, y un buen sabor en boca, que en las bodegas subterráneas del pueblo, ganaba en calidad con el tiempo, aunque fuera un vino de consumo anual. Una pena su pérdida.
Existían además, unas veintiséis bodegas clásicas subterráneas, teniendo unas tres/cuatro, el lagar para elaborar el vino. Una parte importante de los vecinos, tenían vino de su cosecha para todo el año. Éste, se metía en carrales de madera que se conservaba estupendamente en la bodega de cada uno.
En cuanto a la ganadería,  había varios rebaños de ganado lanar, con unos excelentes lechazos y corderos, que al horno de leña como antes se hacía también el pan, eran un verdadero manjar. En el pueblo, había tres/cuatro pastores, que llevaban al campo, los rebaños de varios vecinos, y alguno, tenía rebaño propio. También había algo de ganado caprino y caballar. Entre los años 1950/1960,  El ganado que se utilizaba para las labores agrícolas, eran las vacas principalmente; aunque estas, pronto dieron paso al ganado mular y caballar. Existía un corral llamado de las burras, donde los vecinos, llevaban los animales que no trabajaban para que se les llevara al campo a pacer. Para ése menester, había un pastor que se pagaba entre todos. Éste, avisaba a los vecinos, tocando una gran caracola, que se oía en todo el pueblo.
Otro modus vivendi, era que la mayor parte de los vecinos tenían un huerto para su autoconsumo de verduras como: lechugas, cebollas, cebolletas, berza, puerros, ajos, fresas, etc. etc. Aparte de estas verduras, se aprovechaban otras que nacían solas por el campo como: las aceras, lecherinas, berros, manchocos, también existía alguna huerta con diversos tipos de frutales: manzanos, perales, guindos, cerezos, limoneros, higueras, nogales; además había varias guindaleras (y unos pocos cerezos) repartidas por diversas partes del campo.
Un comentario que no quiero dejar pasar, y es que cuando yo tenía entre 7/9 años, había en el pueblo un par de mozos de unos 17 años, que en sus horas libres, se dedicaban a plantar guindaleras en las zonas del campo que estaban perdidas por ser terreno de mala calidad, y claro, no se les logró ninguna.          O sea, que decididos y emprendedores sí que eran. Eran grandes amigos. Uno, se llamaba Juan y el otro, César. Éste, era hermano mío.
Existían unos seis palomares, de los que creo aún perviven unos cuatro, aunque en mal estado. Una verdadera pena.
En cuanto a la caza, había bastante cantidad de: codornices, perdices, liebres, y ya en menor medida, conejos, zorros, y jabalíes.
Aparte de los pastores de ovejas, que conocían muy donde había huras de conejo y las camas de las liebres, había algún cazador en el pueblo, que cazaba la liebre con galgos y a veces, invitaban a amigos de pueblos próximos, a acompañarlos.

En los ríos Ucieza y Valdecuriada, abundaban los cangrejos autóctonos, y los barbos. No se quien pudo ser el listo que se cargó nuestros cangrejos, pero….., bueno, mejor dejarlo. Personas de más edad que yo,  me han indicado, que antaño allá por los años 1.920/30, también se pescaba la trucha. Y a lo largo y ancho de las riberas de ambos ríos, podíamos contemplar el verdor de varios plantíos de zalces y chopos.      En éllos, hacían sus nidos las pigazas (urracas) (hoy en día, vecinas de las ciudades), y no podemos olvidarnos de los picamadera (pájaro carpintero). Éste ave, que hasta los años 1.950/60 se la veía con mucha frecuencia por nuestra tierra, ahora se le da por desaparecido. Otra ave que también frecuentaba el pueblo, era el aguanieves o lavandera blanca, especialmente, en los meses de invierno. Es un ave inquieta, de aspecto inocente, simpático y limpio. 
La emigración rural.

Entre el final de los años 1.940 y el año 1.980, se produjo la mayor emigración conocida en nuestra tierra, y nuestro pueblo, no fue una excepción. Debemos tener en cuenta, que un buen número de las familias de entonces, tenían tres o más hijos. Por poner un ejemplo. En mi familia, yo soy el octavo de nueve hijos.
Cuando yo era un “chiguito”, el promedio de hijos por casa que yo recuerdo, era de 4,4 aproximadamente. Por lo que cuando te hacías mayor, solo había trabajo para todos durante el verano, pero no durante el resto del año. Todo iba bien más o menos, mientras todos vivíamos en casa de nuestros padres; pero cuando pensabas independizarte y en formar tu propia familia, la cosa ya era diferente.
La mayor parte de vecinos del pueblo, tenían capital, para vivir una sola familia, y algunos, mas bien pocos, para dos. Por lo tanto, creo que la emigración, fue ineludible y necesaria. Tuvimos que irnos del pueblo, personas de todas las familias. Hubo familias que se fueron todos sus componentes. Con más o menos recursos en cada casa, no había para todos. Sin mas paliativos.
Aparte de lo indicado, hasta la llegada del tractor, la agricultura estaba bastante atrasada en muchos aspectos, y aún así, necesitó de varias décadas para llegar al nivel que ha alcanzado hoy en día. Ahora  mismo, en la zona rural, se vive bien; pero sigue teniendo el sino de sus habitantes, y los inviernos, son verdaderamente tristes. Sin embargo, el verano allí es mucho más agradable y más llevadero que en la ciudad. Pero claro, no todo el mundo tiene la suerte de ser de pueblo ni pueblo a donde ir.

Las zonas a las que se emigró principalmente, fueron: Vizcaya, Santander, y Barcelona al principio, y posteriormente, a Madrid y Valladolid, cuando se instaló en ésta última la fábrica de coches Fasa/Renault. 
También hubo uno que se atrevió a ir al norte de Europa a trabajar. Valiente, él.   




(3) Datos de población.

He localizado por varias fuentes en Internet, algunos datos sobre los habitantes del pueblo. Los que relaciono, creo que no son todos los que existen, pero creo nos pueden dar una idea bastante aproximada.
He comprobado, que hay ciertas diferencias en función de la fuente consultada, pero éstas son mínimas. Otra curiosidad, es que hay años con número habitantes y vecinos; y otros, solo de vecinos. Es lo que hay.
 
Años conseguidos:    1.842             1.848              1.850              1.857              1.860                   1.877                                                                         
Número vecinos:          34                     73                   73                    55                     54                             62

Años conseguidos:     1.880   1.881    1.882   1.883    1.884   1.885   1.886   1.887    1.888    1.889       
Número vecinos:                                                      50                       58                     60                        69
Número habitantes:                                              206                      206                  209                      231

Años conseguidos:    1.890    1.891    1.892    1.893    1.894    1.895    1.896    1.897    1.898    1.899    
Número vecinos:                           75                                                   68                        62                        67
Número habitantes:                                                                                                        245       


Años conseguidos:   1.900    1.901    1.902    1.903    1.904    1.905    1.906    1.907   1.908     1909      
Número vecinos:            63         62                        60                                                                               61
Número habitantes:                                              234            

Años conseguidos:    1.910    1.911    1.912    1.913    1.914    1.915    1.916    1.917    1.918     1919  
Número vecinos:            62          61                        57                        59                       59           
Número habitantes:                                                                            216                     209

Años conseguidos:          1.920    1.921    1.922    1.923    1.924    1.925    1.926    1.927    1.928   1929
Número habitantes:             57                       62                                                                                                 

Años conseguidos:    1.930       1.931       1.932       1.933       1.940       1.950       1.960       1.970  
Número habitantes:       51                                               62             49             55            38            28
Número habitantes:     221                                             200

Años conseguidos:        2.000    2.001    2.002    2.003    2.004    2.005    2.006    2.007    2.008    2.009
Número habitantes:           61         57          58          55          55         55          51         53           51        52

Años conseguidos:        2.010    2.011    2.012    2.013    2.014    2.015    2.016    2.017    2.018    2.019
Número habitantes:           50          46         44          44          42         41                    
Los datos con escritura violeta, están sacados del libro de cargos de la diputación de Palencia  http://libroscargos.diputaciondepalencia.es/Home/SelectAnnos/249
   El resto de datos con escritura negrita, están sacados del INE.
Como podemos observar, en el año de 1.891, tenía 75 vecinos (unos 245 vecinos). Quizás el año de mas población de su historia.
Por hacernos una idea y poder comparar con pueblos de nuestro entorno y según el censo del año 2.015,  Villasarracino, tiene 142 habitantes, La Serna, 96 habitantes,  y Villamoronta 262 habitantes.
Hoy en día, las personas que podemos llamar vecinos con toda propiedad, son unos 23. Me refiero a los que viven allí todo el año.

Luego ya en verano, varias familias se van a pasar allí una temporada de 4/6 meses. Lo cierto, es que en verano, se está mucho mejor que en las capitales.